“HE aquí que tú eres hermosa, amiga mía, he aquí que tú eres hermosa; Tus ojos entre tus guedejas como de paloma…” Cantares 4:1
¡Tú – eres mujer!
Por Olga Nevmerzhytska
Ucrania
Mi querida hermana, amiga mía, hermosa mía – eres una mujer-. Sin importar de qué edad eres – eres la corona de la creación de Dios. Sin importar cuantas batallas refleja tu rostro – tú eres la más bella entre todas las flores-. ¡Tú Eres Hermosa! el Padre te trajo a este mundo para un papel tan especial que solo tú lo puedes cumplir.
Tu tarea es amar, cuidar, regalar hermosura, ternura y cariño. ¡Mi hermosa y dulce hija de Dios! Aunque pienses que no tienes fuerzas, talento, salud, el Padre se deleita en ti porque te ha amado. Entrega tu vida a la mano a Dios, sigue Sus propósitos y a tu vida vendrá la satisfacción y alegría, los frutos de tu trabajo superarán todas sus expectativas. Todo lo que tú propondrás hacer, te va acercar más a Dios y tu vida se llenará de colores y de esplendor.
Se una mujer completa, celebra y cuida de tu feminidad, tu dignidad y la perfección de la hermosura que el Padre ha puesto en ti. No te eches atrás, no cambies el diseño original por alguna copia. Dios te ama así como eres y Él se preocupa por ti. No tienes que hacer nada para ganar a Su amor. Solo acepta el hecho que el Padre te creó para su deleite, para comunión con Él. Entrega tu vida a Él y te va estar transformando para que tú crezcas hasta ser como Él.
Eres una mujer, dulce, amable, cariñosa, amable, elegante, trabajadora, la correcta y la necesaria, sin ti el mundo no puede seguir por lo tanto, Dios te ha creado y te amó desde el principio con un amor tierno, amor paterno. No eres huérfana, ¡no estás sola! Dios está contigo.